En materia de energía, las siglas ACS significan “agua caliente sanitaria”.
El agua caliente sanitaria es el agua potable de que disponemos en nuestros hogares y oficinas y que calentamos para nuestra higiene personal, limpieza del hogar, cocina, etc.
El agua caliente sanitaria puede obtenerse por calderas o calentadores que se emplean para calentar el agua mediantes distintos tipos de energía: electricidad, gasóleo, gas natural, gas butano, etc.
Cada vez es más común obtener el agua caliente sanitaria a partir de la energía solar térmica.