Una catástrofe es cualquier suceso inesperado, ya sea a causa de la naturaleza (catástrofe natural) como por obra del hombre (una guerra o un atentado terrorista), cuyas manifestaciones en forma de daños materiales y/o personales son de magnitudes enormes.
Estas catástrofes se conocen con el término “fuerza mayor”, y están incluidas en todos los contratos de seguros en forma de exclusiones de la obligación de la compañía aseguradora de indemnizar si ocurren. El argumento, entendible, de este tipo de exclusión de la obligación de indemnizar es el impacto económico que generaría en su patrimonio el tener que restaurar todo el daño que la catástrofe hubiera causado en los bienes y las personas.
El Consorcio de Compensación de Seguros es el organismo de la administración que hace frente, limitadamente a estos daños producidos por las catástrofes.