Una campana extractora es un aparato electrodoméstico situado por encima de una cocina, destinado a la extracción de los humos, la grasa en suspensión en el aire, los productos de combustión, los olores, el calor, y el vapor del aire mediante una combinación de filtrado y la evacuación del aire. Todo ello gracias a su poder de succión.
Los humos tienen salida a través de un conducto conectado a las chimeneas de ventilación del edificio, para su vertido a la atmósfera.
En Consumoteca queremos hacerte la elección de tu campana extractora más cómoda, y queremos contribuir a que ésta sea informada.
Te resumimos aquí todos los contenidos publicados hasta la fecha y relacionados con las campanas de cocina. Para empezar, elige un tema:
Todo sobre campanas extractoras
–Tipos de campanas extractoras en el mercado
–Cómo funciona una campana extractora
–A qué cosas prestar atención al comprar una campana extractora
–Cómo limpiar la campana de la cocina
–La etiqueta energética de una campana extractora
Normativa relacionada
No existe una normativa específica que regule este electrodoméstico, aparte de la norma de seguridad y de la etiqueta energética que tienen que tener.
Pero en algunas Comunidades autónomas como Cataluña, la normativa autonómica exige que para obtener la cédula de habitabilidad de una vivienda, la campaña extractora forme parte de los electrodomésticos de base de la misma.
Todas las viviendas tienen que disponer de:
a) Servicios de agua fría y caliente, evacuación de aguas y electricidad, de acuerdo con la normativa vigente, y que el edificio las tenga conectadas a las redes de servicio públicas, salvo los contadores individuales necesarios para el usuario final.
b) Un equipo higiénico que esté formado, como mínimo, por un lavamanos, un inodoro y una ducha.
c) Un equipo de cocina que esté formado, como mínimo, por un fregadero y un aparato de cocción, y que disponga de un sistema específico de extracción mecánica sobre el aparato de cocción conectado que permita la extracción de vahos y humos hasta la cubierta.
- Decreto 141/2012, de 30 de octubre, por el que se regulan las condiciones mínimas de habitabilidad de las viviendas y la cédula de habitabilidad (DOGC de 2 de noviembre de 2012) (ver online).
