Una aventura al encuentro de la naturaleza y la historia de Perú. El Camino Inca (Qhapac Ñan) es una de las rutas turísticas más hermosas que nos regala el continente americano. Una experiencia fascinante a lo largo de los 43 kilómetros que separan la ciudad de Cusco con la fortaleza de Machu Picchu.
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Un poco de historia
Esta ruta no es un simple artificio para atraer turistas, sino un camino auténtico.
Es un trazado que formó parte de la tupida red de senderos que, siglos atrás, se extendieron por buena parte de América del Sur (desde el actual Ecuador hasta el norte de Chile y Argentina) y que sirvió como eficaz vía de comunicación a lo largo y ancho del Imperio Inca.
Los historiadores estiman que esta red viaria llegó a tener unos 30.000 kilómetros de extensión. El Camino Inca que conduce a Machu Picchu es solo una pequeña parte de ellos.
Construido a mediados del siglo XV por el emperador inca Pachacutec, el Camino Inca cayó en el olvido hasta que fue redescubierto en el año 1915 durante los trabajos arqueológicos en la antigua ciudad imperial de Cusco.
Camino Inca: el recorrido
Existen dos versiones del Camino Inca, dos opciones a elegir para los viajeros, según el tiempo que dispongan durante su viaje a Perú.
Camino Inca clásico
Es la versión genuina de la ruta, el Camino Inca de 4 días y 3 noches con una longitud total de 39 kilómetros.
La experiencia más auténtica, una ruta para descubrir la gran diversidad ecológica de la región y muchos sitios arqueológicos perfectamente conservados.
En los tramos más altos el camino alcanza una altitud de 3.600 metros sobre el nivel del mar.
La organización del camino incluye en el precio el guía, los traslados, el alojamiento en ruta, las comidas y la asistencia médica, entre otros servicios.
Camino Inca corto
En esta opción, el trayecto se limita solamente a los 11 kilómetros finales del camino, lo cual supone una ruta de 2 días y 1 noche. Es una ruta menos exigente, de dificultad moderada.
Además, la altitud máxima que se alcanza es de 2.745 metros sobre el nivel del mar.
Sea cual sea la modalidad elegida, al final del camino nos espera la recompensa de disfrutar de una de las maravillas del mundo en todo su esplendor: el Machu Picchu.
El precio de la entrada al complejo se incluye en el precio de la excursión.
Recomendaciones para recorrer el Camino Inca
Mejor época del año para la visita
La estación seca, entre mayo y septiembre, es el momento ideal para emprender la aventura del Camino Inca. Fuera de esta época la ruta sigue siendo accesible, aunque las lluvias pueden suponer molestias que nos impidan sacarle todo el partido a esta experiencia.
Hay que tener en cuenta que, independientemente de la época elegida, la alta montaña supone para el viajero tener que soportar bajas temperaturas.
Y, probablemente, también un poco más de cansancio debido a la altitud.
¿Qué llevar?
Para afrontar con éxito la aventura del Camino Inca se recomienda llevar una mochila de 10-15 litros de capacidad y correas para distribuir el peso, además de una funda impermeable por si llueve.
El vestuario adecuado debe incluir pantalones anchos (largos o cortos), una chaqueta impermeable o poncho para lluvia, gorra para protegerse del sol, varios pares de calcetines y calzado cómodo.
Para ayudarse en la ruta, no están de más un par de bastones de trekking. También es conveniente incluir en el equipaje unas gafas de sol con protección UV, una linterna de bolsillo y algo de dinero para propinas y gastos extra.
Por último, no debemos olvidar llevar siempre agua y nuestros objetos de aseo personal.
