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Coser a máquina
En la actual sociedad en que vivimos es habitual no encontrar casi nunca la ocasión para encontrar tiempo para hacer algo que realmente nos guste, “que nos llene”. Cuántas veces no habremos oído a nuestros amigos, o incluso dicho a nosotros mismos frases como “ a ver si consigo sacar tiempo» o «el fin de semana hago un hueco…” pero que al final nunca se acaban llevando a cabo. En este post hablamos de los beneficios de la costura.
La costura es beneficiosa
Una actividad para la que es sencillo conseguir ese tiempo extra es la costura. La costura es una excusa magnífica no ya sólo para “pasar tiempo con nosotros mismos”. También lo es para poder crear algo con nuestras propias manos. Algo que nos haga sentir que nuestro tiempo y esfuerzo han valido la pena.
Esta sensación de que tenemos tiempo de cuidar de nosotros mismos que la costura nos provoca, es idónea para relajar nuestro cuerpo y mente en estos tiempos de confinamiento y altos niveles de estrés.
Ayuda a combatir el burn out
Ya sea a mano o a máquina, aprender a coser en casa, es una labor que cumple todos los requisitos para recuperarnos de síndromes tan comunes en la actualidad como el del Burn Out.
No en vano, este trastorno emocional afecta sobre todo al ámbito laboral debido a la inmensa carga de trabajo, poco reconocimiento y el estilo de vida que este conlleva.
Dedicación a sí mismo
Otro de los beneficios de la costura es la dedicación personal. Sacar tiempo para uno mismo con el que permitirte dedicarte a algo que tú sientes que es para tu propio y exclusivo placer es una actividad aconsejada por los colegios de psicólogos de todo el mundo.
La principal razón de esta apuesta por el tiempo para sí mismo, es que aumenta todos los niveles de complacencia en nuestro organismo.
Coser a máquina frente a las pantallas
Coser a máquina, además, nos ayuda a huir de las típicas fuentes de entretenimiento de nuestros días, todas ellas basadas en pantallas de las que somos espectadores pasivos.
La dependencia de una o varias pantalla, además de provocar lesiones articulares en el cuello y de dañar la vista, somete a nuestro cerebro a una continua exposición a estímulos que en nada contribuyen a ese deseado estado de relajación.
Todo lo contrario. Coser a máquina nos ayuda a ampliar nuestra creatividad y ayuda a nuestro cerebro a “entrenar” conceptos tan importantes como la concentración o la planificación.
Esta ganancia de concentración de la costura nos ayudará a abstraernos de problemas mundanos y gracias a la inmensa variedad de técnicas que nos propone (punto de cruz, remallado, bordado, patchwork…), está especialmente indicada para personas con problemas de memoria o trastornos
del comportamiento.
De hecho, en muchos grupos de terapia se recomienda coser porque es una actividad perfecta para ser realizada en grupo, fomentando el trabajo en equipo y la actividad social.
Además, coser nos permitirá en todo momento tener “la sensación de control” a que tan poco acostumbrados estamos y en la que podemos controlar todos los pasos desde el primer instante.
Estos son sólo algunos de los beneficios de la costura más positivos. Tanto si consideras que necesitas hacer una pausa en la vorágine de tu vida diaria como si meramente “tienes la necesidad de crear algo con tus propias manos” la costura bien merece su oportunidad.
