La Comisión Nacional de Energía (CNE) de España fue el ente regulador de los sistemas energéticos, creado por la Ley 34/1998, de 7 de octubre, del sector de Hidrocarburos, y desarrollado por el Real Decreto 1339/1999, de 31 de julio, que aprobó su Reglamento.
En 2013, sus funciones fueron asumidas por la Comisión Nacional de los Mercados y de la Competencia (CNMC).
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Funciones de la CNE
La CNE fue un organismo público con personalidad jurídica y patrimonio propio, así como plena capacidad de obrar.
Sus objetivos fueron velar por la competencia efectiva en los sistemas energéticos y por la objetividad y transparencia de su funcionamiento, en beneficio de todos los sujetos que operan en dichos sistemas y de los consumidores. A estos efectos se entiende por sistemas energéticos el mercado eléctrico, así como los mercados de hidrocarburos tanto líquidos como gaseosos.
La CNE tuvo atribuidas amplias funciones, además de actuar como un órgano consultivo en materia energética tanto de la Administración General del Estado como de las Comunidades Autónomas. Así, por ejemplo en el sector de hidrocarburos tiene funciones normativas, de propuesta e informe, consultivas y de informe, ejecutivas, de defensa de la competencia, de resolución de conflictos e inspectoras.
Normativa que regula la CNMC
*Ley 3/2013, de 4 de junio, de creación de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (ver online).
