Apostarse la Navidad

En este momento estás viendo Apostarse la Navidad
Billetes euro y mano

Está previsto que a pesar de la crisis estas Navidades aumente el número de participación en los sorteos navideños, en especial en el del Niño. Cuando la situación económica es más desesperada se recurre a la última opción que puede salvar las Navidades de este año, sin tener en cuenta las bajas probabilidades de éxito de esa empresa.

En la mayor parte de núcleos familiares el dinero que se va a dedicar a la lotería del Niño y otras, equivale al que podría estarse gastando para hacerse regalos entre la familia. Teniendo en cuenta las pocas probabilidades de salir ganando, a pesar de la existencia de estadísticas que especulan sobre los números ganadores, de los sueños reveladores y otras formas de predicción, lo más probable es que no ganar y, no solo eso, sino que se haya perdido el dinero en su totalidad.

¿Y todo eso para qué? Los sueños y la esperanza cuestan dinero, esos días anteriores al sorteo, de especulaciones sobre ese futuro incierto en el que quizás los problemas económicos ya no volverán a ensombrecer nuestras vidas, es lo que se está comprando. Pero se trata de una recompensa temporal, inasible, que tarde o temprano caerá por su propio peso, tornando esos regalos en cenizas, cenizas de ilusiones, pero también de aquellos regalos que cuestan exactamente el mismo precio y que si se hubiesen reservado para las compras de Navidad podrían haber aportado una felicidad más material y duradera.

Claro que las posibilidades de que toque siguen estando ahí, entre sus ínfimas probabilidades, siempre queda la sospecha de que el número que todos los compañeros de trabajo han comprado sea el ganador, dejando a los únicos que no lo compraron como los perdedores.

A veces las elecciones no son tan fáciles como los números.

Juan del Real Martín

Soy economista y experto en derecho del consumo y comercio electrónico. He vivido en muchos lugares y me gusta leer y montar en moto.

Después de trabajar durante ocho años en la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), asociación de consumidores más grande de España, decidí crear y financiar Consumoteca.com de mi bolsillo en 2009 para ayudar a las personas a no ser engañadas por las empresas.

Consumoteca, con 4.365 contenidos prácticos y más de 11.000 comentarios de usuarios, tiene una vocación de servicio gratuito para toda la comunidad.

Quiero contribuir con mi experiencia y conocimientos en derecho del consumo, así como en Internet y comercio electrónico a una sociedad más informada.

Lo que me gusta de este proyecto es que está vivo y crece cada día. Todos tenemos una responsabilidad como consumidores. La mía está aquí, en Consumoteca.com.

Deja una respuesta

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.